16 de febrero de 2010

Lo que el viento (Salinas y Zedillo) se llevó


Para quienes aún guarden cierta nostalgia por el tren, aquél medio tan favorito de la mayoría, por económico y entretenido, van estas postales. Era el tren bala, que ocasionalmente paraba en Carbó. Luego vino la ofensiva de ese par de nefastos vividores de la política que únicamente trabajaron (hasta la fecha) para las grandes corporaciones y terminaron con el más popular de los medios de transporte. Ahora el tren es sólo un fantasma ruidoso, cuya existencia nada más alegra a quienes hacen dinero con él.

9 de febrero de 2010

Murió Chávez, un plomero de los de antes

En aquéllos años de las décadas 70 y 80's, los muchachos de entonces percibíamos la vida mucho muy diferente a como es posible sentirla ahora. El pueblo era muy colorido, con una gran gama de auténticos personajes dedicados a las más diversas actividades y con su muy particular gracia cada uno de ellos.
Estaban el cantinero del pueblo, el cura, el maestro, el zapatero, el carpintero, el mecánico, el peluquero, el cartero, el changarrero, el elotero, el cácaro que manipulaba el proyector del cine Lamarque, el fayuquero (a), el galán y la galana sobresalientes por sobre el resto; el excelente bailador y bailadora, etcétera.
Es más, por si alguien faltara, hasta la clase política tenía su patriarca natural en la persona de don Ramón Navarro, de un perfil casi gemelo al famoso cacique don Perpetuo del Rosal, coestrella de Calzonsin Inspector en la revista semanal del gran Rius en épocas sucesivas: 'Los Supermachos' y 'Los Agachados'.
Bueno, pues a propósito de los personajes que difícilmente se olvidan, me hacen saber que anoche estaban velando a Chávez, un muy serio señor que durante muchos años ejerció como el plomero oficial de los carboneños.
Los mayores inolvidables de aquellos años se están yendo, hay que seguir recordándolos.